¡Déjame sólo, Mundo,
yo llegué primero!
Contén tu aliento de muerte,
me repugna, y hay
voces de sangre estéril
oxidándose en tu garganta.
¿Es que no las oyes?
¿No detendrás
tu absurdo artefacto?
Como siempre,
raudo e insolente.
Aislarás de la paz del vacío
una bocanada de vida,
y amnésico retomarás
tu agonía,
masticando tus mejillas
con sonrisa de cadáver.
Saborea.
Pero yo llegué primero.
esta curioso...
ResponderEliminarQue ralladas escribes¡¡
ResponderEliminarA veces estamos en el Mundo y sentimos que este no nos deja sonreir, pero...
"Tú has de ser el cambio que deseas ver ene l mundo"