El zumbido de las dos alas
denotan el peso del viento,
atrapando, acariciando
el tupido hacer del lamento.
Ahora viene la araña,
con sus patas afiladas
haciendo de la planta
su casa,
su lugar,
su morada.
Más aún sigue la abeja,
con su cuerpo erecto
chupando, lamiendo
su cuerpo esbelto.
Pero vendrá la vaca,
que todo se lo traga;
el trabajo de las alas,
de las patas...
Y de todo lugar construido
por las humildes animaladas.
domingo, 12 de septiembre de 2010
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esta chula tio! muy original. al principio pensaba que eran los animales como alegorias pero creo que no es así, q es simplemente una despcripcion poetica del campo
ResponderEliminarcierto es oski roski!
ResponderEliminarFue un día de espera en el campo observando a una araña y a una abeja, saqué el boli y el papel y salió esto.
Un abrazo desde tierras españolas
aunque tambien se puede interpretar como alegoría...
ResponderEliminarGUILLE
Muy chula
ResponderEliminarPobre vaca, todo el mundo la teme... y solo pasaba por ahí..
Por cierto, ese mas de la tercera estrofa va sin acento, porque es igual que el pero
Saludos