No corren tiempos buenos
para nosotros, obreros.
Barricadas insurgentes de lucha
con ánimo de cambio,
de ser los que dan y no reciben.
Los que madrugan todos los días
al compás de la monotonía
para ver su jornada terminada
y el sueldo mensual
con cifras depiladas
y futuro sujeto al capital,
que va y viene
y no se sostiene
en la racionalidad.
El mercado es el que manda
con dictadura de corbatas
alineadas y alienando
a ese hombre que vota cada cuatro años.
¿Dónde está la democracia?
El lujo es más lujo
el desnudo más desnudo
y mientras uno piensa que va a ser de este mundo
se sumerge en lágrimas desconsoladas
y rápidamente te encuentras
en la Nada.
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guau! q descorazonador. pero sin duda q es la cruda realidad. aunke mejor q la huelga es la accion. saludos guille
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