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domingo, 25 de diciembre de 2011

La chaqueta y la dignidad

Llegó, por primer día, al Centro. Él había sido director de orquesta. Ahora tiene Parkinson, y unos hijos muy ocupados. Yo también estoy muy ocupada. Está bien, en los tiempos que corren, que estemos ocupados.
Fue director de orquesta. Deprisa, tomo una hoja con cuatro dibujos navideños para colorear, tres pinturas de cera, se lo acerco. ¿Esto? me pregunta. No entiendo por qué se sorprende. Sí, le contesto. Me mira diez segundos más, con los ojos muy abiertos. Casi se le caen. Ahora entiendo por qué se sorprende. Aun lleva puesta la chaqueta. Se la quito, la llevo fuera. Él comienza a pintar lento, los ojos van recuperando su hueco. Cuelgo la chaqueta fuera. Me llevo también la dignidad.
Me pica un poco. Pero estoy muy ocupada. Le acerco tres pinturas de cera más. No son tan diferentes de una batuta, me rasco. Él ni siquiera levanta ya los ojos. Quizá los tiene también ya muy ocupados. Está bien en los tiempos que corren.

2 comentarios:

  1. bueno, siempre esta bien tener alguna ocupación, la vida es pura ocupación, siempre estamos haciendo algo, aunque ese algo sea sólo dormir o contemplar. el problema es que las ocupaciones creadas por esta sociedad (llamadas empleos) no se han hecho en función del ser humano sino en función de la economía que dicta horarios de trabajo inhumanos.me gustaría saber doña Fátima tu explicación de la máxima que repites: "esta bien que estemos ocupados en los tiempos que corren". por otro lado, entiendo lo de la dignidad de un director de orquesta que luego te choque que termine en una residencia coloreando dibujitos. seguramente existan otras posibles ocupaciones para esta persona que le llenen más y le realicen más, que desarrollen sus habilidades adormecidas en vez de que contribuyan a su deterioro. Sin embargo, tan bien creo que un director de orquesta no tiene porque tener mas dignidad que un barrendero, porque la profesion no deberia etiquetar a una persona. es una tendencia innata al ser humano la generalización y poner etiquetas, pero la dingidad también es innata, independientemente del "empleo" u ocupación que hayas tenido en la vida. entonces la pregunta sobre la dignidad se debería extender a todos los ancianos del Centro. espero tus respuestas con mucho gusto.

    El reflexionador salonero

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  2. Tener que hacer.

    Dignidad, la tuya también.

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